Resumen Conferencia Vespertina
El Pacto de Dios con Moisés y a través de él con Su Pueblo, trajo como consecuencia la desobediencia, la ignorancia y la muerte. Colosenses 2:13, dice que “ (Jesucristo) , a vosotros estando muertos en pecados y en la incircunsicion de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados.”
El incumplimiento del decreto dado por Dios a Moisés a través de la ley sinaítica, produce pecado, y el pecado produce muerte.
La muerte referida aquí, se contiene en un Decreto dictado por Dios, como resultado de la desobediencia, rebeldía o autosuficiencia carnal. Colosenses 2:14 habla de borrar, “anulando” (borrar, Hech 3:19; cancelar) el acta de los decretos –. Se refiere a la ley de Moisés quien “escribió en tablas las palabras del pacto, los diez mandamientos” (Ex. 34:28); “
La Biblia llama al Decreto, resultado del incumplimiento de la Ley, “ministerio de muerte grabado con letras en piedras” (2 Cor. 3:7); agrega el pasaje, que no obstante, y de acuerdo con un nuevo pacto que se llama de justificación, “ nos dio vida en Jesucristo”, “Aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas” (Efesios 2:15).
El Decreto de sanción o castigo resultado del incumplimiento a la ley de Moisés, al que se califica “ministerio de condenación (2ª Corintios 3:9), fue abolido y sustituido por otro ministerio de Dios, llamado “ministerio de justificación” (2ª Corintios 3:9), en razón de haber sido remitido o pagado, mediante la vida de Jesús, es decir , por la muerte de Cristo. Hebreos 7:12 “Porque cambiando el sacerdocio, necesario es que haya también cambio de ley.” (El sacerdocio humano, falló, pecó, se extravió); Hebreos 10:9.”y diciendo luego: he aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad; quita lo primero, para establecer esto último.”
Evidentemente, la ley no justifica; o la cumples o mueres. El nuevo Pacto, basado en la nulidad en el Decreto al incumplimiento del Pacto de ley anterior, opera la Gracia y la misericordia, a los pecadores infractores de la ley, con base en Jesucristo, que es Dios.
Gálatas 3:10,11: “…Escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas… por la ley ninguno se justifica para con Dios” (Gálatas 3:10, 11).
Querer resolver la vida del hombre mediante el antiguo pacto que radica en la ley, equivale a tentar a Dios. Hechos 15:10.”Ahora pues, ¿ por que tentáis a Dios, poniendo sobre la cerviz de los discípulos un yugo que ni nuestros padres ni nosotros hemos podido llevar?
Así es que Jesús es el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo (Jn. 1:29). Cristo es el cumplimiento de la ley.
Ahora, por la fe, resultado del nuevo pacto, viene el conocimiento fijado en nuestros corazones, mentes y voluntad y ser dirigidos por el Espíritu Santo, de manera poderosa, a través de los dones y el poder de Dios, “ Zacarías 4: 6: “No con…sino con mi Santo Espíritu”. El ejercicio practico de la fe, pero una práctica que no es meritoria, sino amoldada la nuevo modelo o nuevo Pacto. “La fe sin obras es muerta” , la oración, el hacer discípulos y vivir en el Espíritu y no satisfacer al hombre carnal. Gálatas 5:17.
El nuevo pacto se recibe no por meritos, como era el anterior, sino por fe, mis que se adquiere según Romanos 10:17 “ por oír la Palabra de Dios”, que equivale al conocimiento de la Voluntad y Palabra profética de Dios, revelada.
2ª Pedro 1:5: “…vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento.”
Colosenses 1:10: “Crecer en el conocimiento para andar o caminar como es digno del Seño, agradándole en todo, llevando fruto.”
Colosenses 2: 14. El apóstol menciona la obra de Dios en Cristo que consiste en que el Decreto, que produjo deuda, al quebrantar la ley de Dios le ha sido quitada su vigencia, anulada, por Cristo, «clavándola en la cruz» (2.14). Dios en Cristo, no sólo ha cancelado dicha deuda de pecado, sino que incluso ha destruido el certificado donde se registraba la deuda provocada por el pecado, (v. 14a).
Además expresa el apóstol Pablo que se ha revocado (despojado) el poder que los principados y potestades tenían sobre nosotros (v. 15), pues la posesión de aquel «auto de acusación condenatorio nos mantenía en las garras de los principados y potestades. A continuación sigue comentando sobre el versículo 15: «Esta manifestación pública de despojar de dignidad y autoridad sirve para demostrar con mayor claridad la infinita superioridad de Cristo
En Col. 3: 1 , presenta el resultado o la consecuencia de haber sido libres de las potestades y principados de maldad “en las regiones celestes”- “Si pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.”.