Dios quiere restaurar nuestra vida para hacernos nuevas criaturas. Esto implica que Dios restaure todas las cosas que estuvieron mal en nuestro pasado, particularmente durante la niñez. Si tú se lo pides, no solamente va a restuarar lo que faltó, sino que además va a sanar tus heridas.

Algunas personas carecieron de la presencia de su padre o madre terrenal, que por algún motivo no estuvieron presentes en alguna etapa o durante toda la niñez y adolescencia; es decir, durante los años principales de la formación. Quizás otros sí contaron con la presencia física de sus padres, pero no con la cercanía espiritual, afectiva y formativa que necesitaban.

Escucha a continuación la enseñanza que habla sobre la restauración de lo que los padres terrenales debieron aportar, de acuerdo a las Escrituras, y que por algún motivo no pudieron hacerlo. Es muy importante señalar que no se trata de juzgar a nuestros padres terrenales. Se trata de pedir a Dios nuestra restauración. En este sentido, si por algún motivo guardas rencor contra tu padre o tu madre, Dios te llevará a perdonarlos para que la restauración sea completa.

Restaurando lo que faltó por parte del padre

Restaurando lo que faltó por parte de la madre

 

Por adminrc